1 Encuentro inesperado Dom Nov 04, 2012 3:05 pm
Slyzt
Chunin
Su camino de exploración se volvió mucho mas largo de lo esperado, pues acabo viajando al país de la hierba, un lugar muy famoso por sus inmensos bosques, aunque esta palabra realmente se quedaba bastante corta, pues era difícil decir si los arboles eran realmente grandes o él había encogido, pues se sentía como si fuera una hormiga en un mundo de gigantes y esto le daba un serio respeto, pero a su vez le daba un gran alivio, pues le parecía un lugar que podría ser bastante divertido y seguramente ocultaría seres que pudieran ser un gran reto para su persona, por ello se preparo para luchar contra todo y mucho mas.
El lugar en el que se encontraba concretamente tenia arboles colosales que podían superar los cien metros de altura y veinte de grosor, habían setas que podían ser del tamaño de casas, siendo lo único normal en ese sitio la hierba. Todo esto era realmente un bosque de hongos y setas, que salían tanto en los arboles como en el suelo, pero a su vez debido a la frondosidad de estos últimos no había mucha luz en el ambiente. A la vista no se encontraba ningún animal ni ser vivo en absoluto, pero si se podía escuchar el cantar de muchos pájaros en la zona, aunque debido al paisaje en el que se encontraba uno hacia sospechar si su tamaño seria normal o se encontraría con seres gigantescos que podrían ver a cualquier transeúnte como simple comida.
Slyzt, o mas bien Lobo Oscuro, se encontraba ahora mismo en una elevada altura encima de una de las ramas de los arboles mientras reposaba y tomaba un aperitivo antes de continuar recorriendo diferentes escenarios o lugares que solo el destino sabría cuales eran y que le pasaría en ellos. Aun así tras la comida se dedico a limpiar sus dos katanas de la forma adecuada, pues no querían que por la humedad del ambiente pudieran llegar a oxidarse, al igual que trataba de mantener las óptimas condiciones los demás objetos.
El lugar en el que se encontraba concretamente tenia arboles colosales que podían superar los cien metros de altura y veinte de grosor, habían setas que podían ser del tamaño de casas, siendo lo único normal en ese sitio la hierba. Todo esto era realmente un bosque de hongos y setas, que salían tanto en los arboles como en el suelo, pero a su vez debido a la frondosidad de estos últimos no había mucha luz en el ambiente. A la vista no se encontraba ningún animal ni ser vivo en absoluto, pero si se podía escuchar el cantar de muchos pájaros en la zona, aunque debido al paisaje en el que se encontraba uno hacia sospechar si su tamaño seria normal o se encontraría con seres gigantescos que podrían ver a cualquier transeúnte como simple comida.
Slyzt, o mas bien Lobo Oscuro, se encontraba ahora mismo en una elevada altura encima de una de las ramas de los arboles mientras reposaba y tomaba un aperitivo antes de continuar recorriendo diferentes escenarios o lugares que solo el destino sabría cuales eran y que le pasaría en ellos. Aun así tras la comida se dedico a limpiar sus dos katanas de la forma adecuada, pues no querían que por la humedad del ambiente pudieran llegar a oxidarse, al igual que trataba de mantener las óptimas condiciones los demás objetos.