1 Entrenamiento en solitario de Daisuke Jue Ago 02, 2012 7:00 am
Daisuke
Jounin
Por fin se hizo de día, ya era hora de ponerse en marcha y Daisuke se estaba retrasando en la cama, la pereza podía con el en ese momento, se estaba tan bien en la cama, pero con un suspiro de resignación se levanto con los ojos legañosos, esa noche se quedo hasta tarde, quería seguir practicando con sus marionetas y cuando se quiso dar cuenta la noche ya era oscura y cerrada así que decidió acostarse, mas vale tarde que nunca se dijo con una risita antes de caer desplomado sobre la cama, ni se arropo, pronto callo en un sueño profundo. Al final se consiguió despejar un poco, tras una larga ducha de agua fría, era necesaria para así poder quitar las nubes de su mente por la falta del sueño, y entro en la habitación, tras abrir de par en par las ventanas y contraventanas pudo sentir la suave brisa que soplaba en Kumo, llevaba poco tiempo en aquella aldea pero de lo que vio y sintió era una de las cosas que mas le agradaban. Se tomo su tiempo hasta que recupero toda la ropa que dejo desparramada por la habitación y se vistió con rapidez, ahora si que tenia ganas de salir, el día era perfecto para comenzar su entrenamiento y así poder conseguir su protector indicante de que ya era un gennin más de aquella aldea. Recogió todo lo necesario, que era poco, y se dispuso a cruzar el umbral de la puerta con un semblante sereno, no quería acelerarse antes de tiempo, se tranquilizo las ganas de echarse a correr para comenzar el entrenamiento… y con un gran suspiro alejando todo el nerviosismo salió a la calle.
Las calles se encontraban tranquilas como era obvio por las horas que eran, pero mejor, no era del gusto de Daisuke estar esquivando a personas para poder avanzar hacia su destino. Aquel inmenso lugar le seguía llamando la atención, acostumbrado a las pequeñas poblaciones sobre todo las costeas donde paso bastante tiempo, sin contar del pasado en su hogar del que solo recordaba vagos pasajes, sobre todo malas experiencias vividas, intento gravar cada imagen en su cabeza, no se perdía detalle, como era obvio era bastante detallista por su trabajo, siempre quería alcanzar la perfección. Su destino no se hizo de desear, haya en el horizonte, al final de la calle principal, se alzaba un gran edificio blanco, en el cual se encontraba un cartel que ponía “Academia”. En ese edificio comenzaría su entrenamiento, según la información que disponía se le asignaría un sensei el cual le instruiría en los entrenamientos básico, pero tenia un problema, se trataba de enseñar en grupos, para que sea así mas fácil su entrenamiento, pero por su naturaleza esquiva bastante le costaba ya ponerse a aprender de un desconocido como para que aun encima tener que compartir entrenamiento con otros desconocidos mas… No, la situación no era fácil, esperaba poder realizar aquel entrenamiento en solitario, si se lo permitía claro esta, aun así tenia la esperanza de que esto fuera cumplido.
Cruzo las grandes puertas de la academia, era un edificio sencillo, constaba de dos salas, o eso fue lo que el pudo ver, pero solo se centro en la primera, donde se encontraba el sitio mas amplio para poder entrenar, para sorpresa de Daisuke se encontraba vacio, por lo tanto tendría toda la zona para si solo y poder entrenar mejor… Tras dejar todos los útiles a un lado se dispuso a comenzar, se coloco en el centro de la sala, tomo aire y recoloco su posición y comenzó a acumular y moldear chakra preparándose para realizar los sellos pertinentes y dando comienzo a su largo y duro entrenamiento.
Las calles se encontraban tranquilas como era obvio por las horas que eran, pero mejor, no era del gusto de Daisuke estar esquivando a personas para poder avanzar hacia su destino. Aquel inmenso lugar le seguía llamando la atención, acostumbrado a las pequeñas poblaciones sobre todo las costeas donde paso bastante tiempo, sin contar del pasado en su hogar del que solo recordaba vagos pasajes, sobre todo malas experiencias vividas, intento gravar cada imagen en su cabeza, no se perdía detalle, como era obvio era bastante detallista por su trabajo, siempre quería alcanzar la perfección. Su destino no se hizo de desear, haya en el horizonte, al final de la calle principal, se alzaba un gran edificio blanco, en el cual se encontraba un cartel que ponía “Academia”. En ese edificio comenzaría su entrenamiento, según la información que disponía se le asignaría un sensei el cual le instruiría en los entrenamientos básico, pero tenia un problema, se trataba de enseñar en grupos, para que sea así mas fácil su entrenamiento, pero por su naturaleza esquiva bastante le costaba ya ponerse a aprender de un desconocido como para que aun encima tener que compartir entrenamiento con otros desconocidos mas… No, la situación no era fácil, esperaba poder realizar aquel entrenamiento en solitario, si se lo permitía claro esta, aun así tenia la esperanza de que esto fuera cumplido.
Cruzo las grandes puertas de la academia, era un edificio sencillo, constaba de dos salas, o eso fue lo que el pudo ver, pero solo se centro en la primera, donde se encontraba el sitio mas amplio para poder entrenar, para sorpresa de Daisuke se encontraba vacio, por lo tanto tendría toda la zona para si solo y poder entrenar mejor… Tras dejar todos los útiles a un lado se dispuso a comenzar, se coloco en el centro de la sala, tomo aire y recoloco su posición y comenzó a acumular y moldear chakra preparándose para realizar los sellos pertinentes y dando comienzo a su largo y duro entrenamiento.